{"id":103280,"date":"2023-08-02T13:06:44","date_gmt":"2023-08-02T11:06:44","guid":{"rendered":"https:\/\/salesianos.info\/?p=103280"},"modified":"2023-08-02T13:06:44","modified_gmt":"2023-08-02T11:06:44","slug":"a-ras-del-suelo","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/salesianos.info\/blog\/a-ras-del-suelo\/","title":{"rendered":"A RAS DEL SUELO"},"content":{"rendered":"
<\/p>\n
Me pregunto en qu\u00e9 momento estoy.<\/p>\n
\u00bfSoy un obrero de la palabra?<\/p>\n
Estoy muy a menudo sentado, consumo aqu\u00ed los pantalones.<\/p>\n
Me los ajusto de vez en cuando en las ingles.<\/p>\n
C\u00f3mo soy ahora, me pregunto, y espero la respuesta,<\/p>\n
medio en broma medio en serio,<\/p>\n
de que teniendo una altura normal,<\/p>\n
me he reducido,<\/p>\n
\u2013enjuto\u2013 dice Diego Toledano,<\/p>\n
estoy demasiado a ras del suelo<\/em>.<\/p>\n Me acabo de sentar en la primera parada de autobuses.<\/p>\n Enfrente el Hotel Mediod\u00eda<\/em> de siempre.<\/p>\n Detr\u00e1s el Bot\u00e1nico<\/em>: jard\u00edn de tierra f\u00e9rtil.<\/p>\n Tiene el agua por debajo. Haces un agujero y sale.<\/p>\n Me r\u00edo.<\/p>\n Por fin, pienso, y noto c\u00f3mo se me ensancha a los lados<\/p>\n mi boca y me brilla entre los dientes la lengua y me pica la nariz<\/p>\n al asomarme a mi risa.<\/p>\n Fue anteayer por la ma\u00f1ana, viernes.<\/p>\n – \u00bfTienes hora? \u2013dice una chica de unos trece a\u00f1os.<\/p>\n Le acompa\u00f1a un chavalito de unos nueve.<\/p>\n Miro el reloj.<\/p>\n – Son las 11 y 10 \u2013digo.<\/p>\n Mientras lo miro, explota adrede sobre mi cabeza un globo lleno de agua.<\/p>\n Me pone perdido.<\/p>\n – Viejo, gilipollas, jajaja.<\/p>\n Salen corriendo.<\/p>\n Intento levantarme. Lo hago. En vano.<\/p>\n Entiendo poco de m\u00ed mismo: sin verg\u00fcenza me vuelvo a sentar y me ajusto los pantalones del ch\u00e1ndal y me pregunto por qu\u00e9.<\/p>\n Llevo el paso del tiempo en la cara. O sea.<\/p>\n La voz de los chicos, sin escuela y sin despensa, se desploma dentro de los sue\u00f1os de un cura cat\u00f3lico, donde se implantan las canciones de cuna de mi abuela y las de Lucien Deiss<\/em> de la reforma lit\u00fargica del Vaticano II.<\/p>\n No te olvides que fui tenor primero en los discos grabados por PPC en Salamanca (1968).<\/p>\n \u00bfRecuerdas: \u201cHija de Si\u00f3n, al\u00e9grate\u201d, \u201cUn solo Se\u00f1or, una sola fe\u2026\u201d.<\/p>\n Por el deje: los chiquillos eran rumanos.<\/p>\n Son los pr\u00edncipes de la inmigraci\u00f3n y las mezclas<\/em>.<\/p>\n Yo tambi\u00e9n soy pr\u00edncipe por mezclas.<\/p>\n De noche siento nostalgia granadina y toledana.<\/p>\n Pero \u00a1ay!, nac\u00ed en Lavapi\u00e9s:<\/p>\n Suma de jud\u00edos, \u00e1rabes y visigodos.<\/p>\n <\/p>\n Recorro mi Paseo del Prado<\/em>, a pie y solo.<\/p>\n Soy uno m\u00e1s de estos \u201cmares\u201d madrile\u00f1os,<\/p>\n \u2013lago de la Casa Campo<\/em>, embalse de El Retiro<\/em>,<\/p>\n donde se ahog\u00f3 mi abuelo Alejandro de Coro\u2013<\/p>\n que tienen tormentas repentinas,<\/p>\n no son resabidos como el Atl\u00e1ntico,<\/p>\n ni son previsibles como el Mediterr\u00e1neo,<\/p>\n as\u00ed que le cojo las vueltas<\/p>\n a cualquier tiempo que vuelva.<\/p>\n En el espejo del Paseo<\/em><\/p>\n siento un escalofr\u00edo jud\u00edo,<\/p>\n al acercarme a las cuatro fuentecillas de Ventura Rodr\u00edguez.<\/p>\n \u00bfLo recuerdas bien o inventas? \u2013me pregunto.<\/p>\n Qu\u00e9 fuerte fue el momento.<\/p>\n Caminaba por el borde de la acera,<\/p>\n quise dejarla libre<\/p>\n para que un grupo de colegiales \u201cteenegers\u201d<\/p>\n \u2013forrados de uniformes azules con escudo\u2013<\/p>\n pasearan a la brava.<\/p>\n Quedan tres rezagados<\/p>\n sobre el l\u00edmite<\/p>\n y me empujan al carril del taxi,<\/p>\n donde me caigo.<\/p>\n \u201cEmpuj\u00f3n de matarifes\u201d.<\/p>\n Salen a todo correr y desaparecen<\/p>\n engullidos por el grupo confesional<\/em>. Lo siento.<\/p>\n Yo cosecho de los sentidos, \u00bfsabes?<\/p>\n Necesitaba manos para levantarme.<\/p>\n Siento en la palma de la mano<\/p>\n el cosquilleo de alg\u00fan alumno<\/p>\n que excava en las margas peladas<\/p>\n del Ocej\u00f3n, El Tornera, El Centenera, la Sierra de Ayll\u00f3n:<\/p>\n San del Cozar, Dani Batanero, Carlos Pouso, Isi Aragon\u00e9s, LuisFran Guijarro\u2026<\/p>\n Y salto como un muelle.<\/p>\n \u201cEs un brinco que hace huir a los demonios\u201d \u2013digo.<\/p>\n Me siento cerca sobre los bordes de una de las fuentecillas<\/em>.<\/p>\n Me sosiego.<\/p>\n Pasan los coches por el carril de taxis.<\/p>\n A toda velocidad.<\/p>\n Se necesitan las manos de los chicos de Don Bosco,<\/em><\/p>\n para seguir viviendo<\/p>\n y escribiendo.<\/p>\n <\/p>\n Es domingo. Nueve de julio.<\/p>\n Pasadas las cuatro fuentecillas<\/em>, me siento en la primera parada.<\/p>\n Inmediato y desinteresado, me pongo a pensar.<\/p>\n El futuro anda suelto por el Prado<\/em>.<\/p>\n Enfrente el Ministerio de Sanidad<\/em>,<\/p>\n detr\u00e1s el Museo del Prado<\/em>\u2026<\/p>\n Quiero ver si casan dos pedazos de tiempo:<\/p>\n el franquismo invasivo y retador,<\/p>\n la Ilustraci\u00f3n, pan fresco y abundante.<\/p>\n Llega derecha, desde hace veinte a\u00f1os,<\/p>\n Pilar Alcaide, mi secretaria en Sanidad Madrid<\/em>,<\/p>\n una distancia<\/p>\n que en ambos parece el tiempo mismo<\/p>\n de un viaje en tranv\u00eda. De los de posguerra.<\/p>\n quiere saber de m\u00ed.<\/p>\n Bajo la piel a\u00f1eja<\/p>\n siento mi rostro de antes<\/p>\n de cambiar el mundo,<\/p>\n y noto que su pasta sigue siendo buena<\/p>\n para todo.<\/p>\n Le voy a decir que debo llevar<\/p>\n al chico de posguerra\u2026<\/p>\n Cuando un peque\u00f1ajo se sienta a mi lado.<\/p>\n – \u00bfC\u00f3mo te llamas? \u2013me dice.<\/p>\n – Paco.<\/p>\n – \u00a1Como el t\u00edo Paco! \u2013a\u00f1ade su padre, desde el carrito vac\u00edo, abajo en la calzada<\/em>.<\/p>\n – Le gusta charlar con todo el mundo \u2013dice.<\/p>\n – Isi\u2026 y sale corriendo.<\/p>\n – \u00bfIsi de Isidro?<\/p>\n – Isi de Isidoro, como yo, su padre.<\/p>\n – \u00a1Vaya joya que tiene usted. Enhorabuena!<\/p>\n Isi chico corretea alrededor de las fuentecillas<\/em>.<\/p>\n – Buen domingo, se\u00f1or.<\/p>\n Me levanto.<\/p>\n Me balanceo como una rama de oto\u00f1o, pierdo hojas.<\/p>\n El suelo est\u00e1 lleno de \u201cpan y quesillo\u201d<\/p>\n \u2013esa flor de la falsa acacia que com\u00edamos en posguerra\u2013.<\/p>\n Acabo de recoger el premio a mi mansedumbre<\/p>\n con los rumanos<\/p>\n y con los garzones del colegio de pago.<\/p>\n Agarro el bast\u00f3n y me marcho, tranquilo, espl\u00e9ndido,<\/p>\n sin una sola palabra.<\/p>\n Le digo al Alcaide<\/p>\n que, en definitiva: no soy yo.<\/p>\n – Si no eres t\u00fa \u2013dice\u2013 nunca has sido t\u00fa.<\/p>\n Aplastada la Consejer\u00eda de Sanidad<\/em> en el recuerdo<\/p>\n en el edificio Matesanz<\/em> de Gran V\u00eda 15<\/p>\n llena mi maleta de vac\u00edos,<\/p>\n desaf\u00edo la ley del ocaso.<\/p>\n <\/p>\n Vivir en Madrid, y en Lavapi\u00e9s,<\/p>\n es un intento de desaf\u00edo,<\/p>\n pero sobre todo,<\/p>\n un intento de<\/p>\n Cortilandia<\/em> emocional y disfuncional.<\/p>\n El asunto es que vuelvo enojado,<\/p>\n despu\u00e9s de un mitin desabrido<\/p>\n en una sociedad que escoge la violencia<\/p>\n \u2013f\u00edsica, verbal, an\u00edmica\u2013<\/p>\n como herramientas de combate.<\/p>\n \u00a1Qu\u00e9 desnutridos a\u00f1os 20 vivimos!<\/p>\n De vuelta a casa, a trav\u00e9s del Prado<\/em>,<\/p>\n me dirijo hacia calle Atocha.<\/p>\n La cruzo por el paso de peatones.<\/p>\n Rapid\u00edsimo.<\/p>\n Tomo la plaza de Juan Goitisolo<\/em> ahora.<\/p>\n Me sale al encuentro un se\u00f1or de mediana edad.<\/p>\n – \u00a1Don Francisco!<\/p>\n – (\u2026)<\/p>\n – \u00bfNo se acuerda de m\u00ed?<\/p>\n – \u00a1Guadalajara!<\/p>\n – Familia S\u00e1nchez\u2026 Mi madre no para de hablar de usted.<\/p>\n Siento el impulso de irme.<\/p>\n – \u00bfUsted dir\u00e1? S\u00e1nchez, conozco cientos.<\/p>\n Imp\u00e1vido y vegetal, no me sale ning\u00fan gesto.<\/p>\n – Disculpe que esta ma\u00f1ana le hayamos despertado.<\/p>\n – Estamos enfrente de su casa terminando obras.<\/p>\n – Una de las profes en Salesianos Guada<\/em> se llama Carmen S\u00e1nchez.<\/p>\n – Mi t\u00eda, hermana de mi madre. \u00a1C\u00f3mo le quiere!<\/p>\n Permanezco desconcertado\u2026<\/p>\n – Hablamos con frecuencia de sus libros.<\/p>\n – \u00a1C\u00f3mo nos quiere!<\/p>\n No s\u00e9 responder.<\/p>\n – Voy a reservar comida para los seis obreros aqu\u00ed en \u201cSanabria<\/em>\u201d.<\/p>\n \u201cQuieto Paco, quieto\u201d \u2013me digo.<\/p>\n – El caso es que no me llega.<\/p>\n Me ense\u00f1a unos treinta euros.<\/p>\n Nunca hab\u00eda estado tan cerca de un timo.<\/p>\n – El caso es que no s\u00e9 lo que llevo \u2013digo.<\/p>\n – (\u2026)<\/p>\n – Acabo de comprar el libro \u201cLa Felipa\u201d.<\/p>\n Y se lo ense\u00f1o.<\/p>\n Lo coge.<\/p>\n – Una grande.<\/p>\n Hurgo en la mariconera.<\/p>\n – Voy a necesitar 37 euros.<\/p>\n – Llevo un billete de 20.<\/p>\n Y se lo doy.<\/p>\n – Espere, en monedas 10.<\/p>\n Y se las doy.<\/p>\n – Cuando estrenemos casa en Marqu\u00e9s de la Valdavia, ya sabe d\u00f3nde nos tiene.<\/p>\n – Buen provecho en \u201cSanabria<\/em>\u201d.<\/p>\n – Nos vemos, nos vemos.<\/p>\n – Sal\u00fademe a los Rebollo, los del 103.<\/p>\n No me sirve de nada una respuesta.<\/p>\n Todo han sido palabras de rebote para timarme.<\/p>\n Desabrida esta sociedad<\/p>\n \u201ca ras del suelo<\/em>\u201d<\/p>\n como decirlo: desaprensiva.<\/p>\n Y no conviene, pero me parece a m\u00ed,<\/p>\n llorar demasiado por la obviedad<\/em>.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Por el Paseo del Prado Mezclas Me pregunto en qu\u00e9 momento estoy. \u00bfSoy un obrero de la palabra? 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