{"id":129243,"date":"2024-11-08T07:10:31","date_gmt":"2024-11-08T05:10:31","guid":{"rendered":"https:\/\/salesianos.info\/?p=129243"},"modified":"2024-11-07T18:13:20","modified_gmt":"2024-11-07T16:13:20","slug":"don-bosco-y-el-fantasma-de-rousseau","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/salesianos.info\/blog\/don-bosco-y-el-fantasma-de-rousseau\/","title":{"rendered":"Don Bosco y el fantasma de Rousseau"},"content":{"rendered":"
[et_pb_section fb_built=\u00bb1″ _builder_version=\u00bb4.16″ global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][et_pb_row _builder_version=\u00bb4.16″ background_size=\u00bbinitial\u00bb background_position=\u00bbtop_left\u00bb background_repeat=\u00bbrepeat\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][et_pb_column type=\u00bb4_4″ _builder_version=\u00bb4.16″ custom_padding=\u00bb|||\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb custom_padding__hover=\u00bb|||\u00bb][et_pb_text _builder_version=\u00bb4.16″ background_size=\u00bbinitial\u00bb background_position=\u00bbtop_left\u00bb background_repeat=\u00bbrepeat\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb]Jean Jacques Rousseau es uno de los pensadores m\u00e1s influyentes en la modernidad, tanto en el campo de la pedagog\u00eda como en el de la pol\u00edtica. Pero su fama se ha construido a pesar de que sus teor\u00edas se basan en principios filos\u00f3ficos muy discutibles, cuando no f\u00e1cilmente rebatibles partiendo de la experiencia.<\/p>\n
Rousseau influye en toda la pedagog\u00eda del siglo XIX, dado que se sit\u00faa en el extremo opuesto de la pedagog\u00eda imperante en aquella \u00e9poca, demasiado autoritaria, memor\u00edstica, e ignorante de las caracter\u00edsticas evolutivas del educando. Rousseau es visto como el descubridor de las potencialidades del ni\u00f1o, y el inspirador de la nueva pedagog\u00eda. Contribuye a crear una pedagog\u00eda m\u00e1s adaptada y flexible; una alternativa liberadora frente al rigorismo de la \u00e9poca.<\/p>\n
En pol\u00edtica tambi\u00e9n ejerce una profunda influencia. A todo el mundo le suena la expresi\u00f3n \u201cEl contrato social\u201d, t\u00edtulo de una obra de nuestro autor, que dio un vuelco tambi\u00e9n a la forma de entender la pol\u00edtica. Rousseau pertenece a los ilustrados del siglo XVIII, que se replantearon todo a partir del ejercicio libre de la raz\u00f3n. Y se preguntaron cu\u00e1l era la legitimidad de la autoridad que se impone a la sociedad. Como las respuestas tradicionales basadas en el origen divino de la autoridad mon\u00e1rquica les resultan insuficientes, buscan otra legitimidad basada en la raz\u00f3n. Y \u00e9sta, a su vez, se basa en el \u201cContrato social\u201d, es decir, en el consenso de unos seres humanos para que otros les gobiernen, pero con la condici\u00f3n de velar por el inter\u00e9s general.<\/p>\n
Rousseau le da un toque particular a este contrato social, porque \u00e9l piensa que la sociedad es lo que corrompe al hombre, que nace limpio y puro. As\u00ed que, cuanto menos poder e instituciones existan, mejor.<\/p>\n
Los anarquistas del siglo XIX sacaron conclusiones de estas premisas, y propusieron una sociedad sin Estado, dado que todas las instituciones corrompen al puro e inocente ser humano, y le alejan del pr\u00edstino estado de naturaleza. Lo malo de este relato, es que el anarquismo pretendi\u00f3 empezar desde cero, destruyendo todo lo existente. No hace falta recordar la tr\u00e1gica historia protagonizada por esta corriente pol\u00edtica en el Siglo XIX y parte del XX.<\/p>\n
El problema de todo esto es que Rousseau se equivocaba. S\u00ed. El maestro inspirador de tantos buenos prop\u00f3sitos en pol\u00edtica y pedagog\u00eda part\u00eda de presupuestos falsos. Falsos de solemnidad. Porque nuestro autor imagina un ser humano de laboratorio, a partir de elucubraciones que nada tienen que ver con la realidad. Porque \u201cel Buen Salvaje\u201d no exist\u00eda en ninguna etnia ni continente. A Jean Jacques le hubiera bastado dar un paseo en una de las expediciones que patrocinaban las potencias mar\u00edtimas de la \u00e9poca, para darse cuenta de que su buen salvaje era tan imaginario como el unicornio. Una corta estancia en cualquier poblado africano te hubiera hecho ver las traiciones, odios, violencias, mentiras que sacud\u00edan a cualquier sociedad humana, por \u201csalvaje\u201d que fuera.<\/p>\n
Rousseau podr\u00eda haberse inspirado en la vieja antropolog\u00eda cristiana, que ve en el ser humano un compendio de posibilidades, tanto para el bien como para el mal. Quiz\u00e1 hubiera aprendido algo de san Agust\u00edn, que tuvo tanto la experiencia del mal como la del perd\u00f3n y la misericordia en su propia vida.
\nDe no haber sido tan te\u00f3rico, quiz\u00e1 hubiera tenido arrestos para educar a alguno de sus cinco hijos, habidos de su relaci\u00f3n con Th\u00e9r\u00e8se Lavasseur, en vez de entregarlos al hospicio, como hizo. No tuvo tiempo de educar a ninguno de ellos, ocupado como estaba en dar lecciones a otros de c\u00f3mo hab\u00eda que educar.<\/p>\n
Si sus prejuicios racionalistas no le hubieran hecho pellizcarse la nariz ante los textos de la antropolog\u00eda cristiana, habr\u00eda encontrado pistas para entender la grandeza y miseria del ser humano, capaz de lo mejor y de lo peor.<\/p>\n
Y el movimiento anarquista no hubiera sido tan iluso al imaginar que bastaba con dinamitar el viejo orden, para que surgiera como por arte de magia una nueva humanidad, basada en un hombre nuevo, incontaminado por las viejas estructuras del pasado decadente.<\/p>\n
Porque el fantasma de Rousseau pervive en nuestras aulas; en las c\u00e1tedras universitarias; en los despachos de la administraci\u00f3n p\u00fablica. Rousseau sigue inspirando a quienes piensan que basta conocer y educar para que todo vaya bien. Que todo es cuesti\u00f3n de a\u00f1adir asignaturas al curr\u00edculum para producir generaciones enteras de seres disciplinados, respetuosos y buenos ciudadanos.<\/p>\n
Don Bosco apenas tuvo tiempo para escribir, porque se pasaba la vida educando. Pero, a diferencia de Rousseau, \u00e9l ten\u00eda claro que cada joven es imagen de Dios, y tambi\u00e9n ten\u00eda claro, que esto no viene en los genes, ni es solo cuesti\u00f3n de aprender c\u00f3mo hay que ser bueno en un contenido curricular. Que es necesario el acompa\u00f1amiento, el ejemplo y la cercan\u00eda. Supo ver, m\u00e1s all\u00e1 de las apariencias, la imagen de Dios en aquellos que otros consideraban delincuentes. Pero con el realismo de saber que tambi\u00e9n eran capaces del mal, y esto se lo hac\u00eda ver a ellos, inst\u00e1ndolos a la autocr\u00edtica, fundamentados en la confianza que da el saberse queridos y perdonados por Alguien que siempre da la oportunidad de cambiar. A diferencia de Rousseau, no escribi\u00f3 mucho, pero dej\u00f3 a la posteridad una lecci\u00f3n de vida que sigue iluminando a millones de personas en todo el mundo.
\n[\/et_pb_text][\/et_pb_column][\/et_pb_row][\/et_pb_section]<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"
Jean Jacques Rousseau es uno de los pensadores m\u00e1s influyentes en la modernidad, tanto en el campo de la pedagog\u00eda como en el de la pol\u00edtica. Pero su fama se ha construido a pesar de que sus teor\u00edas se basan en principios filos\u00f3ficos muy discutibles, cuando no f\u00e1cilmente rebatibles partiendo de la experiencia. Rousseau influye […]<\/p>\n","protected":false},"author":6,"featured_media":129245,"comment_status":"open","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"on","_et_pb_old_content":"
Jean Jacques Rousseau es uno de los pensadores m\u00e1s influyentes en la modernidad, tanto en el campo de la pedagog\u00eda como en el de la pol\u00edtica. Pero su fama se ha construido a pesar de que sus teor\u00edas se basan en principios filos\u00f3ficos muy discutibles, cuando no f\u00e1cilmente rebatibles partiendo de la experiencia.<\/p>
Rousseau influye en toda la pedagog\u00eda del siglo XIX, dado que se sit\u00faa en el extremo opuesto de la pedagog\u00eda imperante en aquella \u00e9poca, demasiado autoritaria, memor\u00edstica, e ignorante de las caracter\u00edsticas evolutivas del educando. Rousseau es visto como el descubridor de las potencialidades del ni\u00f1o, y el inspirador de la nueva pedagog\u00eda. Contribuye a crear una pedagog\u00eda m\u00e1s adaptada y flexible; una alternativa liberadora frente al rigorismo de la \u00e9poca.<\/p>
En pol\u00edtica tambi\u00e9n ejerce una profunda influencia. A todo el mundo le suena la expresi\u00f3n \u201cEl contrato social\u201d, t\u00edtulo de una obra de nuestro autor, que dio un vuelco tambi\u00e9n a la forma de entender la pol\u00edtica. Rousseau pertenece a los ilustrados del siglo XVIII, que se replantearon todo a partir del ejercicio libre de la raz\u00f3n. Y se preguntaron cu\u00e1l era la legitimidad de la autoridad que se impone a la sociedad. Como las respuestas tradicionales basadas en el origen divino de la autoridad mon\u00e1rquica les resultan insuficientes, buscan otra legitimidad basada en la raz\u00f3n. Y \u00e9sta, a su vez, se basa en el \u201cContrato social\u201d, es decir, en el consenso de unos seres humanos para que otros les gobiernen, pero con la condici\u00f3n de velar por el inter\u00e9s general.<\/p>
Rousseau le da un toque particular a este contrato social, porque \u00e9l piensa que la sociedad es lo que corrompe al hombre, que nace limpio y puro. As\u00ed que, cuanto menos poder e instituciones existan, mejor.<\/p>
Los anarquistas del siglo XIX sacaron conclusiones de estas premisas, y propusieron una sociedad sin Estado, dado que todas las instituciones corrompen al puro e inocente ser humano, y le alejan del pr\u00edstino estado de naturaleza. Lo malo de este relato, es que el anarquismo pretendi\u00f3 empezar desde cero, destruyendo todo lo existente. No hace falta recordar la tr\u00e1gica historia protagonizada por esta corriente pol\u00edtica en el Siglo XIX y parte del XX.<\/p>
El problema de todo esto es que Rousseau se equivocaba. S\u00ed. El maestro inspirador de tantos buenos prop\u00f3sitos en pol\u00edtica y pedagog\u00eda part\u00eda de presupuestos falsos. Falsos de solemnidad. Porque nuestro autor imagina un ser humano de laboratorio, a partir de elucubraciones que nada tienen que ver con la realidad. Porque \u201cel Buen Salvaje\u201d no exist\u00eda en ninguna etnia ni continente. A Jean Jacques le hubiera bastado dar un paseo en una de las expediciones que patrocinaban las potencias mar\u00edtimas de la \u00e9poca, para darse cuenta de que su buen salvaje era tan imaginario como el unicornio. Una corta estancia en cualquier poblado africano te hubiera hecho ver las traiciones, odios, violencias, mentiras que sacud\u00edan a cualquier sociedad humana, por \u201csalvaje\u201d que fuera.<\/p>
Rousseau podr\u00eda haberse inspirado en la vieja antropolog\u00eda cristiana, que ve en el ser humano un compendio de posibilidades, tanto para el bien como para el mal. Quiz\u00e1 hubiera aprendido algo de san Agust\u00edn, que tuvo tanto la experiencia del mal como la del perd\u00f3n y la misericordia en su propia vida.
De no haber sido tan te\u00f3rico, quiz\u00e1 hubiera tenido arrestos para educar a alguno de sus cinco hijos, habidos de su relaci\u00f3n con Th\u00e9r\u00e8se Lavasseur, en vez de entregarlos al hospicio, como hizo. No tuvo tiempo de educar a ninguno de ellos, ocupado como estaba en dar lecciones a otros de c\u00f3mo hab\u00eda que educar.<\/p>
Si sus prejuicios racionalistas no le hubieran hecho pellizcarse la nariz ante los textos de la antropolog\u00eda cristiana, habr\u00eda encontrado pistas para entender la grandeza y miseria del ser humano, capaz de lo mejor y de lo peor.<\/p>
Y el movimiento anarquista no hubiera sido tan iluso al imaginar que bastaba con dinamitar el viejo orden, para que surgiera como por arte de magia una nueva humanidad, basada en un hombre nuevo, incontaminado por las viejas estructuras del pasado decadente.<\/p>
Porque el fantasma de Rousseau pervive en nuestras aulas; en las c\u00e1tedras universitarias; en los despachos de la administraci\u00f3n p\u00fablica. Rousseau sigue inspirando a quienes piensan que basta conocer y educar para que todo vaya bien. Que todo es cuesti\u00f3n de a\u00f1adir asignaturas al curr\u00edculum para producir generaciones enteras de seres disciplinados, respetuosos y buenos ciudadanos.
Don Bosco apenas tuvo tiempo para escribir, porque se pasaba la vida educando. Pero, a diferencia de Rousseau, \u00e9l ten\u00eda claro que cada joven es imagen de Dios, y tambi\u00e9n ten\u00eda claro, que esto no viene en los genes, ni es solo cuesti\u00f3n de aprender c\u00f3mo hay que ser bueno en un contenido curricular. Que es necesario el acompa\u00f1amiento, el ejemplo y la cercan\u00eda. Supo ver, m\u00e1s all\u00e1 de las apariencias, la imagen de Dios en aquellos que otros consideraban delincuentes. Pero con el realismo de saber que tambi\u00e9n eran capaces del mal, y esto se lo hac\u00eda ver a ellos, inst\u00e1ndolos a la autocr\u00edtica, fundamentados en la confianza que da el saberse queridos y perdonados por Alguien que siempre da la oportunidad de cambiar. A diferencia de Rousseau, no escribi\u00f3 mucho, pero dej\u00f3 a la posteridad una lecci\u00f3n de vida que sigue iluminando a millones de personas en todo el mundo.<\/p>","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[350,337],"tags":[],"class_list":["post-129243","post","type-post","status-publish","format-standard","has-post-thumbnail","hentry","category-miguel-gambin-gallego","category-opinion","et-doesnt-have-format-content","et_post_format-et-post-format-standard"],"yoast_head":"\n