Querido Se\u00f1or Dios:<\/p>\n
Espero que al recibo de \u00e9sta est\u00e9s bien.\u00a0Yo, bien, gracias a Ti<\/b>. Tengo ante m\u00ed el calendario del a\u00f1o que concluye y el del a\u00f1o que comienza. Antes de terminar este 2017, te escribo estas l\u00edneas para darte las\u00a0gracias por todo lo vivido<\/b>.<\/span><\/p>\n Es cierto que en el a\u00f1o que agoniza hemos visto de todo.\u00a0<\/i><\/span>Probablemente no hayamos tenido muchos motivos para el optimismo; las divisiones pol\u00edticas, las rencillas, la manipulaci\u00f3n de los j\u00f3venes, la violencia contra las mujeres, los enfrentamientos, la pobreza, las guerras\u2026<\/i>han ensombrecido el mundo maravilloso que has dise\u00f1ado para nosotros. Pero tambi\u00e9n quiero decirte\u00a0 que los a\u00f1os, que no pasan en balde, me animan a descubrirte diariamente en las cosas m\u00e1s sencillas de nuestra vida.<\/p>\n Cuando despierto, por ejemplo, intento tenerte presente y agradecerte el nuevo d\u00eda\u2026pero sobre todo en los d\u00edas de invierno, el sue\u00f1o es tan profundo que tardo una media hora, m\u00e1s o menos, en tomar conciencia de que estoy despierto. Entonces s\u00ed que oir\u00e1s mi voz (no muy clara a esa hora) que te da las gracias por el amanecer,\u00a0 por la lluvia, por el fr\u00edo\u2026y hasta por el sue\u00f1o.<\/p>\n Como te dec\u00eda,\u00a0he aprendido a irte descubriendo en las cosas del vivir cotidiano<\/b>\u00a0<\/span>y as\u00ed te vislumbro en la fe de las personas mayores, en los ojos de los cr\u00edos, en las l\u00e1grimas de los enfermos, en los que \u2013desde otras confesiones religiosas- te llaman con otros nombres. Tambi\u00e9n te descubro diariamente en la sincera b\u00fasqueda de los ateos y los que no te conocen.\u00a0Te intuyo en la gente generosa que se desvive por los dem\u00e1s<\/b>, en los profesionales que realizan su trabajo con esmero, en las familias\u2026 en la gente, vaya.<\/p>\n Es verdad, Padre, que la naturaleza habla de Ti, pero est\u00e1 tan manida por los deportes de aventura, el esqu\u00ed, la vela y estas cosas, que tu presencia se me hace m\u00e1s di\u00e1fana y transparente en la historia de los hombres y mujeres. Me emociona ver las ganas de vivir que tienen las personas; me parece precioso que la gente sencilla, arrastrando a veces tantos problemas, se lave, se peine, se arregle antes de salir de casa para mostrarse ante los dem\u00e1s de la forma m\u00e1s agradable y presentable posible. Creo que el primer signo matutino de tu presencia es que la gente salga a la calle arreglada, manifestando as\u00ed respeto hacia s\u00ed mismos y los dem\u00e1s y ganas de hacer la vida m\u00e1s grata para todos.<\/p>\n Te descubro en la baraja de los sencillos, en la m\u00fasica, en el teatro y el arte, en el buen vino compartido, en el dolor de la familia que pierde al ser querido, en la ternura del abuelo, en la voz del amigo preso, en las fantas\u00edas del que se siente solo, en el maravilloso mundo de la educaci\u00f3n, en los amigos, en los hermanos.<\/p>\n Tambi\u00e9n te he descubierto, y qu\u00e9 bien los sabes, en el cine. La pantalla me ha ayudado a lo largo de mi vida a conocerte a trav\u00e9s de las historias, las pasiones y las aventuras de tantos seres humanos que se trascienden a s\u00ed mismos. Los cl\u00e1sicos me han hablado de ti: Ford, Hawks, Kazan,\u00a0 Preminguer, Bergman, Wilder, Kubrick, Visconti, Fellini, De Sica Hitchcock han sido l\u00e1mparas que iluminaban mi mundo en la oscuridad de las salas; tambi\u00e9n los actuales: Scott, Spielberg, Eastwood, Mann, Coppola, Allen, y tantos otros me han emocionado y divertido y ya forman parte de mi historia; tambi\u00e9n los nuestros Aranda, Garci, Camus, Almod\u00f3var, Saura, Bu\u00f1uel, Cuerda, Amen\u00e1bar, Bolla\u00edn, Villaronga, Bayona y estos directores cercanos que nos presentan la grandiosa fragilidad del ser humano en la magia del s\u00e9ptimo arte.<\/p>\n Como salesiano,\u00a0te descubro en los adolescentes y j\u00f3venes<\/b>, que andan comi\u00e9ndose tanto la cabeza, pein\u00e1ndose con elegancia, con pantalones de pitillo y adicionados al m\u00f3vil, \u00a0intentando impresionar, intentando descubrirse, afirmarse, aceptarse y quererse en un mundo en el que el futuro est\u00e1 rodeado de buitres que intentan saquearles su juventud. Aunque me cuesta adaptarme a las exigencias de las cambiantes administraciones educativas, no me cuesta nada descubrirte entre los j\u00f3venes en el mundo de la educaci\u00f3n.<\/p>\n Te intuyo en los inmigrantes<\/b>, en aquellos hijos tuyos que, v\u00edctimas de un reparto injusto de la riqueza, han tenido que dejarlo todo para buscar un futuro m\u00e1s digno. Te descubro en los refugiados, en aquellas personas a las que nadie mira y llegan huyendo del horror que hemos creado nosotros mismos. En sus ojos veo los ojos de tu Hijo\u2026en su Historia veo la historia del peque\u00f1o Jes\u00fas, huyendo de los poderes de su tiempo y siendo extranjero en Egipto. En su muerte veo la cruz.<\/p>\n Tambi\u00e9n, Padre, te descubro en personas que, desde plataformas muy distintas se empe\u00f1an en construir un mundo m\u00e1s humano: obreros, voluntarios,\u00a0 educadores, m\u00e9dicos, periodistas, curas, m\u00fasicos\u2026te intuyo en los maestros, en los padres y madres, en los abuelos, en todos aquellos que ayudan a hacer crecer la vida.<\/p>\n Y, naturalmente, te encuentro en la Sagrada Escritura, tan vilipendiada, tan olvidada por nuestra cultura reinante y tan apasionante y necesaria.<\/p>\n Te descubro en mis hermanos de comunidad, a los que amo a pesar de las diferencias y con quienes creo que es posible hacer que nuestra vida sea una profec\u00eda luminosa.<\/p>\n Celebro tu presencia en la Eucarist\u00eda y en los sacramentos por m\u00e1s que los que presidamos tengamos nuestros defectos y nuestras limitaciones como cualquier hijo de vecino.<\/p>\n Lo cierto es que no me es nada dif\u00edcil creer en Ti. Casi me atrever\u00eda a decir que la fe, en mi caso, no tiene mucho m\u00e9rito. Para m\u00ed, creer es como respirar, besar, re\u00edr, llorar\u2026vivir.<\/i><\/p>\n Por eso en esta carta, antes de empezar el a\u00f1o nuevo, quiero darte las gracias por todas las personas que me han ayudado y me ayudan a amarte. Por mis padres y por tantas personas buenas que me han ense\u00f1ado a ver el mundo desde el agradecimiento y el compromiso. De una manera especial, te doy las gracias por toda la gente que ha alimentado mi fe a lo largo del a\u00f1o que concluye.<\/p>\n Haz, Padre, a que en el a\u00f1o que ahora empieza sepa ser coherente con mi fe y con lo que escribo; ay\u00fadame a que mis torpes letras se conviertan en testimonio de tu Hijo y clamor rabioso contra la injusticia que permite que a tantos hijos tuyos les arrebaten la dignidad. Ay\u00fadame a esforzarme\u00a0 para ser testigo de esperanza, de esfuerzo compartido por un futuro m\u00e1s humano y, por tanto, m\u00e1s Tuyo. Hazme coherente con lo que soy.<\/p>\n Espero volver a escribirte pronto. Tus noticias me llegan, como te he dicho, cada d\u00eda.<\/p>\n Recibe un fuerte abrazo de tu hijo.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Querido Se\u00f1or Dios: Espero que al recibo de \u00e9sta est\u00e9s bien.\u00a0Yo, bien, gracias a Ti. Tengo ante m\u00ed el calendario del a\u00f1o que concluye y el del a\u00f1o que comienza. Antes de terminar este 2017, te escribo estas l\u00edneas para darte las\u00a0gracias por todo lo vivido. Es cierto que en el a\u00f1o que agoniza hemos […]<\/p>\n","protected":false},"author":17,"featured_media":1325,"comment_status":"open","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[340,337],"tags":[],"yoast_head":"\n