{"id":7275,"date":"2018-12-21T13:25:14","date_gmt":"2018-12-21T13:25:14","guid":{"rendered":"https:\/\/salesianos.info\/?p=7275"},"modified":"2018-12-21T13:25:14","modified_gmt":"2018-12-21T13:25:14","slug":"el-olor-de-la-navidad","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/salesianos.info\/blog\/el-olor-de-la-navidad\/","title":{"rendered":"El olor de la Navidad"},"content":{"rendered":"
Un azote de emoci\u00f3n me golpe\u00f3 el rostro. De todos los olores que he percibido a lo largo de mi vida, \u00e9ste, \u00e9ste, es el que m\u00e1s amplitud de recuerdos me abarca. En \u00e9l apreso mil sensaciones acumuladas en el desv\u00e1n de los a\u00f1os. Es una r\u00e1faga m\u00faltiple confeccionada por otras tantas peque\u00f1as r\u00e1fagas: el olor de las almendras, mezclado con az\u00facares, huevo, y alguna otra cosa que no logro descifrar, quiz\u00e1s harinas, higos, humores de plantas raras y exquisitas. Todo est\u00e1 contenido en simples envases de cart\u00f3n con nombre propio: \u201cLa Jijonenca\u201d, \u201cTurrones Jijona\u201d. A\u00f1o tras a\u00f1o, al llegar la Navidad, lo buscaba insistentemente con la punta de la nariz. Hoy, al encontrarlo cualquier d\u00eda en cualquier VIP de cualquier poblaci\u00f3n recupero la impresi\u00f3n de un amor, ay, que est\u00e1 a punto de desaparecer.<\/p>\n
El turr\u00f3n de almendra de Jijona. Me gusta reconocerme en ese olor lejano y suelo hacer muchos experimentos para poner a prueba la memoria.<\/p>\n
Para escaleras empinadas, oscurecidas e interminables las de Zurita 45. Casi todos los meses las sub\u00eda y bajaba un par de veces en busca de las onzas de chocolate que t\u00eda Luc\u00eda me ofrec\u00eda con cara risue\u00f1a. Si lo que existe no es la temperatura, sino la sensaci\u00f3n clim\u00e1tica, la casa de mis t\u00edos Quili y Luc\u00eda era un c\u00e1lido pabell\u00f3n bot\u00e1nico donde \u00e9ramos felices Roman\u00edn y yo como verdes adormideras. Pero en Navidad las onzas de chocolate se convert\u00edan en tabletas de turr\u00f3n. El turr\u00f3n de Jijona hac\u00eda de brasero. Fue el mejor brasero de aquellas Navidades, a caballo de los a\u00f1os 50.<\/p>\n
T\u00eda Luc\u00eda, como t\u00edo Quili, era transparente. Si hubiera llegado a insinuar amor\u00edos, su mentira hubiera pasado m\u00e1s que cualquier verdad. Posiblemente ten\u00eda tentaciones, como casi todas sus vecinas. Lo que no ten\u00eda eran oportunidades. Un d\u00eda y otro y todos los d\u00edas frente al fog\u00f3n o a la pila de lavar, con las manos enharinadas o chorreando agua y lej\u00eda y un delantal gris manchado. \u00a0Una mujer de Lavapi\u00e9s, con mangas arremangadas y pelo restirado, prendido con docenas de orquillas. Un mech\u00f3n lacio, ca\u00eddo sobre la frente y unas piernas robustas entreabiertas como en partos de guisos y cocidos.<\/p>\n
-Todo a tiempo, \u00bfte das cuenta, Nieves?<\/p>\n
-Eso, todo en el momento debido.<\/p>\n
-El pavo por aqu\u00ed, la lombarda, las pasas.<\/p>\n
-Las cosas a su tiempo, cu\u00f1ado.<\/p>\n
-Nunca es demasiado pronto.<\/p>\n
-\u00a1Qu\u00e9 guapo que est\u00e1 Nin\u00edn!<\/p>\n
-Son ya 18 a\u00f1os, hija.<\/p>\n
-Es el m\u00e1s alto de la familia.<\/p>\n
-El caso es que no s\u00e9 a qui\u00e9n ha salido.<\/p>\n
-Pues a quien va a salir: lo mejor de los Bustos y lo mejor de los Rodr\u00edguez-Osorio.<\/p>\n
-Cuatro d\u00edas, cuatro, es lo que vivimos.<\/p>\n
Y as\u00ed y as\u00ed hablaban sin fin los d\u00edas de Navidad y Nochevieja t\u00eda Luc\u00eda y mam\u00e1, en la Corrala de Zurita 45. Eran d\u00edas de cruzar los cables de la realidad y el sue\u00f1o, de cantar villancicos y poner buena cara a todo y a todos. Me hechizaba el molino del Nacimiento<\/em> de t\u00eda Luc\u00eda, aquella mole oscura, incansable en el movimiento de sus aspas, sorbiendo todo para su disfrute y el r\u00edo \u201cde verdad\u201d, ce\u00f1ido por lavanderas y pastoras de mentira y no digamos el despliegue soberbio de los tres Reyes Magos con sus lacayos tirando de las bridas de los camellos.<\/p>\n Yo reviv\u00eda cuando llegaban aquellas fiestas y las pas\u00e1bamos con los t\u00edos. Hasta mam\u00e1 parec\u00eda cambiar de color, como si ninguna nube se detuviera en su ventana. Atardecido, Madrid navide\u00f1o se oculta tras los cristales, bajo la neblina. La losa de la fantas\u00eda pesa sobre el centro de nuestros cerebros. Nuestra sinfon\u00eda de villancicos apenas, apenas, si puede cosquillear el relajado horizonte de nuestras calles de Argumosa, Delicias, Lavapi\u00e9s, Legazpi, siempre a medio pronunciar, siempre ambiguos los sonidos, como si las palabras no se tomaran en serio.<\/p>\n -Ande, ande, ande la marimorena \/<\/p>\n Ande, ande, ande, que hoy es Nochebuena.<\/p>\n Ten\u00eda miedo a que fuera verdad, a que all\u00ed tuviera el coraz\u00f3n y el juego de la \u201cNoche de Dios\u201d terminara con los turrones y golosinas hasta empacharme. Mi primo Nin\u00edn se escond\u00eda durante las comidas y cenas bajo el follaje de su flequillo y no abr\u00eda la boca para nada. Pap\u00e1 y t\u00edo Quili tos\u00edan al borde de la congesti\u00f3n, mientras apuraban grandes copas de \u201cFundador\u201d (\u00a1Es cosa de hombres!). Hablaban de hombre a hombre y se contaban todo de pe a pa y de cigarro a cigarro, con los labios entre el lenguaje y la chupada y los ojos entorpecidos por el humo.<\/p>\n -La nochebuena se viene \/ la Nochebuena se va.<\/p>\n Y nosotros nos iremos \/ y no volveremos m\u00e1s.<\/p>\n Como ves, amigo Javier, el llamado mal de Alzh\u00e9imer todav\u00eda no lo he asumido como rasgo social impuesto de la modernidad. Es m\u00e1s, yo sospecho que eso del Alzh\u00e9imer es un pasajero que se ofrece como un agente externo, como un mangante de recuerdos y un saqueador de la memoria y de la conciencia.<\/p>\n Pero la gran noticia de estos d\u00edas es que ese mal puede prevenirse con la lectura. Mi m\u00e9dico de cabecera ya me escribi\u00f3 desde los infartos la receta para salirle al paso: \u00abT\u00f3mese por la ma\u00f1ana un poema, unas hojas de enciclopedia durante el d\u00eda, y por la noche cinco o seis cap\u00edtulos de novela; o uno de ensayo, si es deconstructivista\u00bb. El problema, mientras tanto, Javier, sigue siendo el secular mosquito del olvido<\/em>. \u00bfQui\u00e9n si no \u00e9l est\u00e1 detr\u00e1s de la pol\u00edtica del Gobierno, que amenaza con borrar del mapa las peque\u00f1as cosas<\/em> de la Navidad, del olor de la Navidad?<\/p>\n Cap\u00edtulo tomado del libro ‘Las alhajas de Nieves’, de Paco de Coro, publicado por la Fundaci\u00f3n NIPACE (si lo quieres adquirir a beneficio de la fundaci\u00f3n, puedes consultar su p\u00e1gina web: https:\/\/www.fundacionnipace.org\/<\/a>).<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Un azote de emoci\u00f3n me golpe\u00f3 el rostro. De todos los olores que he percibido a lo largo de mi vida, \u00e9ste, \u00e9ste, es el que m\u00e1s amplitud de recuerdos me abarca. En \u00e9l apreso mil sensaciones acumuladas en el desv\u00e1n de los a\u00f1os. Es una r\u00e1faga m\u00faltiple confeccionada por otras tantas peque\u00f1as r\u00e1fagas: el […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":7278,"comment_status":"open","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[362,363],"tags":[],"class_list":["post-7275","post","type-post","status-publish","format-standard","has-post-thumbnail","hentry","category-blogs","category-blog-de-andar-y-pensar","et-has-post-format-content","et_post_format-et-post-format-standard"],"yoast_head":"\n