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Nos hemos acostumbrado a ver la sonrisa de los dem\u00e1s a trav\u00e9s de su mirada, aunque realmente, esto no es del todo cierto; no nos acostumbramos.<\/p>\n[et_pb_section fb_built=\u00bb1″ _builder_version=\u00bb4.16″ global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][et_pb_row _builder_version=\u00bb4.16″ background_size=\u00bbinitial\u00bb background_position=\u00bbtop_left\u00bb background_repeat=\u00bbrepeat\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][et_pb_column type=\u00bb4_4″ _builder_version=\u00bb4.16″ custom_padding=\u00bb|||\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb custom_padding__hover=\u00bb|||\u00bb][et_pb_text _builder_version=\u00bb4.17.0″ background_size=\u00bbinitial\u00bb background_position=\u00bbtop_left\u00bb background_repeat=\u00bbrepeat\u00bb hover_enabled=\u00bb0″ global_colors_info=\u00bb{}\u00bb sticky_enabled=\u00bb0″]<\/p>\n
Nos hemos acostumbrado a ver la sonrisa de los dem\u00e1s a trav\u00e9s de su mirada, aunque realmente, esto no es del todo cierto; no nos acostumbramos.<\/p>\n
Cu\u00e1nto se expresa con una sencilla sonrisa, la expresi\u00f3n de alegr\u00eda, emoci\u00f3n, nervios\u2026 o lo contrario, poder ver la tristeza cuando los ojos no lo muestran. Hemos aprendido a esconder emociones detr\u00e1s de una mascarilla, a la cual decimos estar acostumbrados, pero cada vez pesas m\u00e1s.<\/p>\n
En este segundo trimestre de curso, segundo a\u00f1o de pandemia, viviendo la presencialidad en las aulas hemos normalizado echarnos gel al salir y entrar en clase, a tener la mascarilla puesta en los recreos, a separarnos mientras comemos en el recreo al aire libre o a comer solos cada d\u00eda para no juntarnos con compa\u00f1eros por prevenci\u00f3n. Nos hemos hecho expertos en vacunas y mascarillas, pero estamos cansados.<\/p>\n
Voy con mis alumnos de seis a\u00f1os a cada recreo, les veo seguir su rutina de separarse para tomar la merienda del recreo y no moverse hasta terminar para poder ir a jugar con su mascarilla bien puesta. Sin embargo, tengo que confesar que disfruto cada d\u00eda el momento en el que se quitan su mascarilla y puedo ver esa sonrisa que me hace sonre\u00edr a m\u00ed. Esas miradas acompa\u00f1adas de una sonrisa de complicidad y de felicidad que expresan su alegr\u00eda, ya sea porque ha llegado la hora de almorzar o por mi inter\u00e9s al preguntarles qu\u00e9 han tra\u00eddo ese d\u00eda para el recreo.<\/p>\n
Cada d\u00eda, en ese momento, me pesa la mascarilla. Necesitamos volver a ver esas sonrisas sinceras, de alegr\u00eda o tristeza, pero que expresan cada sentimiento y emoci\u00f3n como nada lo hace en el mundo.<\/p>\n
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Nos hemos acostumbrado a ver la sonrisa de los dem\u00e1s a trav\u00e9s de su mirada, aunque realmente, esto no es del todo cierto; no nos acostumbramos.<\/p>
Cu\u00e1nto se expresa con una sencilla sonrisa, la expresi\u00f3n de alegr\u00eda, emoci\u00f3n, nervios\u2026 o lo contrario, poder ver la tristeza cuando los ojos no lo muestran. Hemos aprendido a esconder emociones detr\u00e1s de una mascarilla, a la cual decimos estar acostumbrados, pero cada vez pesas m\u00e1s.<\/p>
En este segundo trimestre de curso, segundo a\u00f1o de pandemia, viviendo la presencialidad en las aulas hemos normalizado echarnos gel al salir y entrar en clase, a tener la mascarilla puesta en los recreos, a separarnos mientras comemos en el recreo al aire libre o a comer solos cada d\u00eda para no juntarnos con compa\u00f1eros por prevenci\u00f3n. Nos hemos hecho expertos en vacunas y mascarillas, pero estamos cansados.
Voy con mis alumnos de seis a\u00f1os a cada recreo, les veo seguir su rutina de separarse para tomar la merienda del recreo y no moverse hasta terminar para poder ir a jugar con su mascarilla bien puesta. Sin embargo, tengo que confesar que disfruto cada d\u00eda el momento en el que se quitan su mascarilla y puedo ver esa sonrisa que me hace sonre\u00edr a m\u00ed. Esas miradas acompa\u00f1adas de una sonrisa de complicidad y de felicidad que expresan su alegr\u00eda, ya sea porque ha llegado la hora de almorzar o por mi inter\u00e9s al preguntarles qu\u00e9 han tra\u00eddo ese d\u00eda para el recreo.<\/p>
Cada d\u00eda, en ese momento, me pesa la mascarilla. Necesitamos volver a ver esas sonrisas sinceras, de alegr\u00eda o tristeza, pero que expresan cada sentimiento y emoci\u00f3n como nada lo hace en el mundo.<\/p>","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[429,1388],"tags":[],"class_list":["post-74703","post","type-post","status-publish","format-standard","has-post-thumbnail","hentry","category-convadongacid","category-el-rincon-de-mama-margarita","et-doesnt-have-format-content","et_post_format-et-post-format-standard"],"yoast_head":"\n