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Estos \u00faltimos d\u00edas ha sido noticia, aunque un tanto apagada por muchas otras, la aprobaci\u00f3n de la iniciativa legislativa popular (ILP), por la que se reconoce personalidad jur\u00eddica al Mar Menor, al que algunos llaman anticipadamente \u201cel Mar Muerto II\u201d.<\/p>\n
Esta ILP tuvo el apoyo de 640.000 firmas recogidas en todo el territorio espa\u00f1ol, en aplicaci\u00f3n de lo previsto en el art\u00edculo 87\/3 de la Constituci\u00f3n.<\/p>\n
La cosa viene de lejos. Viene de d\u00e9cadas de saqueo de los recursos naturales por parte de los poderes econ\u00f3micos regionales, con la complicidad de las administraciones p\u00fablicas y la indiferencia de la mayor parte de la ciudadan\u00eda, a la que preocupaban m\u00e1s otros temas, y \u00e9ste le parec\u00eda cosa de hippies y desocupados[1]<\/strong>.<\/p>\n Todo empez\u00f3 a finales de los sesenta, con la urbanizaci\u00f3n salvaje de la Manga del Mar Menor, un espacio geol\u00f3gico singular, que podr\u00eda haber sido un original parque natural, \u00fanico en Europa, y abrigo de una fauna espec\u00edfica singular. Podr\u00eda haber sido, pero no fue. El resultado final fue una arquitectura del desprop\u00f3sito, en la que se han infringido todas las normas medioambientales y las de seguridad.<\/p>\n A la urbanizaci\u00f3n salvaje, sigui\u00f3 la explotaci\u00f3n salvaje de las tierras colindantes y la proliferaci\u00f3n de macrogranjas, (que nada tienen que ver con la ganader\u00eda tradicional, respetuosa del medio ambiente y generadora de riqueza y de empleo). El problema fue alertado hace d\u00e9cadas por ANSE (Asociaci\u00f3n Naturista del Sureste), y otras asociaciones ecologistas. Pero la ciudadan\u00eda de la Regi\u00f3n de Murcia ha sido siempre muy conformista con el poder, sea cual fuere su origen y naturaleza. La denuncia de la situaci\u00f3n cr\u00edtica del mar menor fue recurrente desde los a\u00f1os 80 del siglo pasado. Cada cierto tiempo ocurr\u00eda un episodio de contaminaci\u00f3n que perturbaba t\u00edmidamente la languidez del veraneo con alg\u00fan titular llamativo. Las autoridades regionales hac\u00edan declaraciones y promesas de portarse bien, lo que tranquilizaba a los pac\u00edficos murcianos, as\u00ed que todo volv\u00eda enseguida a la normalidad de la siesta estival. Todo estaba en orden.<\/p>\n Pero todo estaba sumido en un profundo caos, cuyo avance se ha acelerado en estos \u00faltimos diez a\u00f1os. No han faltado las protestas del gobierno regional, e incluso alg\u00fan prop\u00f3sito de enmienda, de poca duraci\u00f3n y menos efecto.<\/p>\n Lo que s\u00ed ha abundado los \u00faltimos a\u00f1os ha sido el cruce de acusaciones entre el gobierno regional y el central, a pesar de que el art\u00edculo 10 del Estatuto de Autonom\u00eda de la Regi\u00f3n de Murcia, en los n\u00fameros 6,7,8 y 9, deja sin sombra de dudas a qui\u00e9n corresponde la gesti\u00f3n del entorno del Mar Menor, que no es ni m\u00e1s ni menos que el Gobierno Regional.<\/p>\n Todo se ha acelerado estos dos \u00faltimos a\u00f1os: tantas agresiones provenientes de una agricultura y ganader\u00edas, saqueadoras del medio ambiente, junto con las borrascas que han castigado la regi\u00f3n, han puesto al Mar Menor al borde de ser considerado el Mar Muerto, pero sin su fortaleza de Masada.<\/p>\n Tal ha sido la situaci\u00f3n, que hasta la gente de Murcia ha reaccionado, y ha puesto en marcha un proceso de recogida de firmas que ha desembocado en la ILP a la que hac\u00edamos alusi\u00f3n al principio.<\/p>\n Dotar de personalidad jur\u00eddica al Mar Menor es hacerle objeto de una protecci\u00f3n legal especial. Es un modelo de protecci\u00f3n ambiental \u00fanico en Europa, que puede abrir nuevos horizontes en las pol\u00edticas medioambientales.<\/p>\n No se trata de romanticismos vac\u00edos ni de idealismos est\u00e9riles. Proteger la naturaleza es protegernos a nosotros mismos. Esto no han entendido muy bien los hosteleros del Mar Menor, cuando han visto caer en picado el n\u00famero de turistas, y los propietarios de inmuebles, que han contemplado horrorizados c\u00f3mo se depreciaban sus viviendas.<\/p>\n Entonces se ha entendido muy bien que formamos parte del medio, y lo necesitamos. Y\u00a0 necesitamos a las plantas y animales singulares que lo pueblan, y no podemos aplicar el est\u00fapido criterio utilitarista de preguntarse para qu\u00e9 sirve un caballito de mar. [1]<\/strong> Para deshacer cualquier tipo de malentendido, declaro solemnemente que soy murciano, lo que me da un cierto conocimiento de la realidad de mi regi\u00f3n, y libertad de autocr\u00edtica.<\/em> \u201cTodos tienen el derecho a disfrutar de un medio ambiente adecuado para el desarrollo de la persona, as\u00ed como el deber de conservarlo\u201d. Art 87 (CE) Estos \u00faltimos d\u00edas ha sido noticia, aunque un tanto apagada por muchas otras, la aprobaci\u00f3n de la iniciativa legislativa popular (ILP), por la que se reconoce personalidad jur\u00eddica al […]<\/p>\n","protected":false},"author":6,"featured_media":75383,"comment_status":"open","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"on","_et_pb_old_content":" \u201cTodos tienen el derecho a disfrutar de un medio ambiente adecuado para el desarrollo de la persona, as\u00ed como el deber de conservarlo\u201d. 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El resultado final fue una arquitectura del desprop\u00f3sito, en la que se han infringido todas las normas medioambientales y las de seguridad.<\/p> A la urbanizaci\u00f3n salvaje, sigui\u00f3 la explotaci\u00f3n salvaje de las tierras colindantes y la proliferaci\u00f3n de macrogranjas, (que nada tienen que ver con la ganader\u00eda tradicional, respetuosa del medio ambiente y generadora de riqueza y de empleo). El problema fue alertado hace d\u00e9cadas por ANSE (Asociaci\u00f3n Naturista del Sureste), y otras asociaciones ecologistas. Pero la ciudadan\u00eda de la Regi\u00f3n de Murcia ha sido siempre muy conformista con el poder, sea cual fuere su origen y naturaleza. La denuncia de la situaci\u00f3n cr\u00edtica del mar menor fue recurrente desde los a\u00f1os 80 del siglo pasado. Cada cierto tiempo ocurr\u00eda un episodio de contaminaci\u00f3n que perturbaba t\u00edmidamente la languidez del veraneo con alg\u00fan titular llamativo. Las autoridades regionales hac\u00edan declaraciones y promesas de portarse bien, lo que tranquilizaba a los pac\u00edficos murcianos, as\u00ed que todo volv\u00eda enseguida a la normalidad de la siesta estival. Todo estaba en orden.<\/p> Pero todo estaba sumido en un profundo caos, cuyo avance se ha acelerado en estos \u00faltimos diez a\u00f1os. No han faltado las protestas del gobierno regional, e incluso alg\u00fan prop\u00f3sito de enmienda, de poca duraci\u00f3n y menos efecto.<\/p> Lo que s\u00ed ha abundado los \u00faltimos a\u00f1os ha sido el cruce de acusaciones entre el gobierno regional y el central, a pesar de que el art\u00edculo 10 del Estatuto de Autonom\u00eda de la Regi\u00f3n de Murcia, en los n\u00fameros 6,7,8 y 9, deja sin sombra de dudas a qui\u00e9n corresponde la gesti\u00f3n del entorno del Mar Menor, que no es ni m\u00e1s ni menos que el Gobierno Regional.<\/p> Todo se ha acelerado estos dos \u00faltimos a\u00f1os: tantas agresiones provenientes de una agricultura y ganader\u00edas, saqueadoras del medio ambiente, junto con las borrascas que han castigado la regi\u00f3n, han puesto al Mar Menor al borde de ser considerado el Mar Muerto, pero sin su fortaleza de Masada.<\/p> Tal ha sido la situaci\u00f3n, que hasta la gente de Murcia ha reaccionado, y ha puesto en marcha un proceso de recogida de firmas que ha desembocado en la ILP a la que hac\u00edamos alusi\u00f3n al principio.<\/p> Dotar de personalidad jur\u00eddica al Mar Menor es hacerle objeto de una protecci\u00f3n legal especial. Es un modelo de protecci\u00f3n ambiental \u00fanico en Europa, que puede abrir nuevos horizontes en las pol\u00edticas medioambientales.<\/p> No se trata de romanticismos vac\u00edos ni de idealismos est\u00e9riles. Proteger la naturaleza es protegernos a nosotros mismos. Esto no han entendido muy bien los hosteleros del Mar Menor, cuando han visto caer en picado el n\u00famero de turistas, y los propietarios de inmuebles, que han contemplado horrorizados c\u00f3mo se depreciaban sus viviendas.<\/p> Entonces se ha entendido muy bien que formamos parte del medio, y lo necesitamos. Y\u00a0 necesitamos a las plantas y animales singulares que lo pueblan, y no podemos aplicar el est\u00fapido criterio utilitarista de preguntarse para qu\u00e9 sirve un caballito de mar.
\nLa parte sarc\u00e1stica del asunto es que, al final, son los clientes de Centro Europa quienes van a obligar a nuestros empresarios a respetar las leyes del medio ambiente, pues empiezan a boicotear los productos provenientes de la zona. Ser\u00eda el colmo.<\/p>\n
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La parte sarc\u00e1stica del asunto es que, al final, son los clientes de Centro Europa quienes van a obligar a nuestros empresarios a respetar las leyes del medio ambiente, pues empiezan a boicotear los productos provenientes de la zona. Ser\u00eda el colmo.<\/p>
[1]<\/strong> Para deshacer cualquier tipo de malentendido, declaro solemnemente que soy murciano, lo que me da un cierto conocimiento de la realidad de mi regi\u00f3n, y libertad de autocr\u00edtica.<\/em><\/p>","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[350,337],"tags":[],"class_list":["post-75382","post","type-post","status-publish","format-standard","has-post-thumbnail","hentry","category-miguel-gambin-gallego","category-opinion","et-doesnt-have-format-content","et_post_format-et-post-format-standard"],"yoast_head":"\n