«Estamos aquí, en esta ciudad que es vuestra». Estas fueron las palabras del cardenal Manuel Clemente, patriarca de Lisboa, que dieron inicio a la Misa de apertura de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), ante algo más de 200.000 peregrinos que habían llenado las calles de la ciudad, y por la tarde ponían rumbo a la Colina del Encuentro, en el Parque Eduardo VII, en el corazón de Lisboa. Un sólido contingente de seguridad, que funcionó a la perfección, garantizó un acceso rápido de todos al lugar de la celebración.
Con un programa de animación rico y variado, la alegría juvenil estaba en todas partes. Banderas de muchos países, más de 152 nacionalidades, bailes, canciones y sonrisas. Muchas sonrisas. Don Bosco, uno de los Patronos de las JMJ se sentiría como en casa.
En camino como María
Y fue ese deseo el que Mons. Clemente transmitió a todos: «¡Bienvenidos todos! Bienvenidos también en la amplitud ecuménica, interreligiosa y de buena voluntad que estos días tienen y congregan. Deseo que os sintáis como en casa, en esta casa común en la que viviremos la Jornada Mundial. ¡Bienvenidos!»
Partiendo del Evangelio de la Visitación, el Cardenal destacó la importancia del camino que los jóvenes habían hecho para estar aquí, y el Camino que es la vida, viendo cada día como una nueva etapa. Al igual que María, que llevaba a Jesús en su vientre, el Patriarca de Lisboa desafió a los jóvenes a llevar a Jesús a los demás: «Así estaréis vosotros, en esta prisa sin ansiedad, como quien comparte lo que va leyendo. ¡Lo que os trajo aquí y llevaré añadido por la gracia de estos días!»
Terminando su homilía, Mons. Manuel instó a los jóvenes a aprender «con María a saludar a todos y cada uno. Practiquémoslo intensamente en los días de esta Jornada Mundial de la Juventud.»
Y ese espíritu de comunión fue el que destacó una joven del Movimiento Juvenil Salesiano: «A veces creemos que para rezar bien es necesario estar solo, pero aquí, entre miles de personas, de diferentes países, con personas que no conoces, la oración comunitaria, celebrando en comunidad, es muy fuerte».
La misa fue animada por el coro y la orquesta de la JMJ Lisboa 2023, compuesto por cientos de jóvenes venidos de todo el país, y dirigidos por Joana Carneiro. En este mismo lugar está marcada la celebración de acogida al Papa, el próximo jueves, y el Vía Crucis el viernes.
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