El miércoles 11 de junio, la Asociación de María Auxiliadora (ADMA) de Ripoll realizó una salida a Montserrat con motivo de la conmemoración del milenario de la fundación del monasterio. Un grupo de 33 personas participó con mucha devoción. Durante la celebración de la Eucaristía, la presidenta de la entidad, Fina Casaponsa, hizo la ofrenda de la peregrinación, un gesto emotivo que marcó el inicio de la misa.
Después, los miembros de la ADMA subieron a venerar la imagen de la Virgen de Montserrat, un momento intenso de oración y recogimiento.
La jornada continuó con una comida de hermandad en el pueblo de Jorba, donde el padre Enric Garcia, antiguo alumno de los Salesianos de Ripoll y actual párroco de la parroquia, les acogió y preparó la comida.
Para cerrar el encuentro, se hicieron una fotografía de recuerdo. “El ADMA de Ripoll mantiene viva la devoción a María Auxiliadora y organiza mensualmente una Eucaristía en el monasterio de Ripoll, donde se venera una imagen de María Auxiliadora”, compartían.
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