¿Miedos? Él camina a nuestro lado
La Virgen María, en esos pocos instantes de la Anunciación, ha sabido rechazar el miedo, aun presagiando que su “sí” le daría pruebas muy duras.
Si en la oración comprendemos que cada día que Dios nos regala es una llamada, agrandamos el corazón y acogemos todo. Se aprende a decir: “Lo que Tú quieras, Señor. Prométeme solo que estarás presente en cada paso de mi camino”.
Esto es lo importante: pedir al Señor su presencia en cada paso de nuestro camino. No nos dejará solos, no nos abandonará en la tentación ni en los momentos difíciles. Lo decimos al final del Padre Nuestro, es lo que Jesús mismo nos ha enseñado a pedir al Señor.
LA PREGUNTA: ¡El miedo es libre! La seguridad en nuestro “SÍ” es regalo de Dios. ¿Me atrevo?
RETO MARIANO
Colocar un retrato del Papa Francisco (donde se vea alegre y sonriente) y exponerlo junto a la Auxiliadora para que todos lo vean. Hoy se trata de saludarnos esbozando una sonrisa durante todo el día. El Papa nos invita a vivir la alegría y nosotros de esta manera construimos Iglesia y comunión.