María, mujer de participación
Aunque María en su viaje tiene prisa por llegar a casa de Zacarías, espera a la puerta silenciosa y paciente el permiso y la bienvenida de alguien que abra la puerta mientras, en el silencio de su corazón, recuerda todo lo que le ha ocurrido: el anuncio de que va a ser la Madre del Mesías. ¡Su vocación!
El pestillo al otro lado de la puerta, el “Shalom” de saludo de Isabel, el abrazo o el beso, de bienvenida, permiten compartir el Espíritu de vida que le anima.
‘Entrar’ y ‘saludar’ es compartir y ‘participar’, en una estructura o un sistema, con nuestros dones, carismas y bendiciones, compartir y transmitir lo mejor de nosotros mismos a los demás, creer en ellos, en sus propios dones y bendiciones. ¡Como María!
FLOR: En tus relaciones habituales. ¿Ofreces acogida y aprecio de lo bueno de cada uno? ¿Hay personas o situaciones que te piden cambiar? ¡Mira a María!
SANTO DOMINGO SAVIO
Tiempo interior
Dedica un tiempo de reflexión al comentario del Evangelio
RETO MARIANO
Elige una canción que te guste (como ha elegido Sergio Codera en el vídeo de la derecha) y ponle una letra de cómo crees que Domingo Savio haría una oración cantada a María Auxiliadora.
Si te animas graba el estribillo y compártelo en tus redes sociales con el hashtag #DomingoSavio.