María, Mujer cumplidora de la Palabra

Como Abraham, María vio rotos sus planes y siguió el camino de Dios como servidora de la Palabra con su vida, hasta la máxima dificultad de la Cruz, cuando, abandonada, rechazada y burlada por todos, siguió fiel en su ser y en su vida a la Palabra de Dios.

Muerto Jesús, su cuerpo en los brazos de María y ya en la tumba es para nosotros:

semilla de Vida, siembra de amor, de presencia, de caridad, de perdón, frente al pecado, el mal y la muerte, siembra de entrega de quien, desde el seno de María y ya hombre, se entregó a sí mismo en la Cruz, como testigo del Dios amor.

Si, como María, creemos en él y hacemos nuestra su Palabra, entramos en la Vida de Dios y Él en la nuestra.

FLOR: En el inicio de S. Lucas descubre a María como referencia. Pídele ayuda para ser fiel a esa palabra.