El Palacio de Congresos y Exposiciones de Sevilla (FIBES) ha acogido en la mañana del 23 de septiembre el acto de entrega de las distinciones honoríficas de la ciudad para personas y entidades correspondiente a 2020, ya que la crisis sanitaria originada por el COVID-19 impidió la celebración del tradicional acto institucional se celebra todos los años el 30 de mayo en el Teatro Lope de Vega con motivo del Día de San Fernando, patrón de la ciudad.
Durante el acto, el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, quien ha presidido la ceremonia, ha destacado la labor de los homenajeados y ha comenzado su discurso recordando la celebración del V Centenario de la Primera Vuelta al Mundo, al que ha puesto “como ejemplo de la infinita capacidad del ser humano para afrontar lo imposible; para resistir y reinventarse en la resiliencia”.
A este respecto, ha trasladado un mensaje de optimismo y esperanza ante la incertidumbre, al tiempo que ha recordado a las víctimas por la COVID-19. “Sevilla a lo largo de su historia ha sabido salir de situaciones graves y tiene que volver a ser la ciudad de la cultura, la ciencia, la universalidad, el emprendimiento y el trabajo; ligada al turismo y al comercio, claro que sí, pero también a la digitalización y la innovación como yacimientos de empleo y de oportunidades”, ha señalado el alcalde de Sevilla, al tiempo que ha apuntado a que “ahora se espera de nosotros que estemos unidos, aún en la discrepancia cuando la haya, aportando lo mejor de cada uno y construyendo juntos un proyecto colectivo que llamamos Sevilla”.
Por último, Espadas ha recordado la figura del que fuera alcalde de Sevilla, Manuel del Valle. “La ciudad, en medio de una pandemia, vio partir a un hombre bueno que quiso a esta ciudad hasta el final de sus días, que asumió el mayor honor para un sevillano, ser su alcalde y que con su entrega y vocación de servicio ayudó a transformar y recuperar su vocación universal desde la moderación y el consenso, desde el rigor y la austeridad. Político con mayúsculas y mejor persona, gracias, Manuel del Valle, descanse en paz”, ha concluido.
Una casa con 75 años de historia
Cabe destacar que este reconocimiento llega 25 años después de la insignia de Alfonso X el Sabio concedida al Colegio Mayor San Juan Bosco en el aniversario de sus bodas de oro en 1995.
Desde el año 1943 la Congregación de los Salesianos de San Juan Bosco no ha dejado de acompañar a los universitarios en Sevilla a través de su “Casa” con un primer grupo de universitarios que vivieron en la casa salesiana de San Benito de Calatrava en el centro de Sevilla mientras se construía el edificio actual junto a la calle Arroyo. La palabra “Casa” no es un recurso metafórico para los Salesianos. Decir “Casa” hace referencia al ambiente especial y al estilo educativo que caracteriza la labor.
Los Salesianos siguen hoy adelante en su trabajo de “acompañar” y favorecer el desarrollo integral de los universitarios con el fin de seguir, fiel a su orígenes, mejorando la Sociedad a través de su dedicación educativa y evangelizadora de la juventud. Todos los años al inicio del curso académico se abre el Colegio Mayor San Juan Bosco a más de un centenar de universitarios dispuestos a vivir una experiencia de formación, amistad y compañerismo. Los Salesianos hacen año a año todo lo posible para que se cumplan los objetivos educativos y pastorales de su misión con los jóvenes: formar buenos cristianos y honrados ciudadanos a través de una metodología propia llamada “Sistema Preventivo”.
A lo largo de sus 75 años de existencia, el Mayor San Juan Bosco ha contribuido a enriquecer la vida política, académica, religiosa, cultural y social con sus antiguos colegiales que han ocupado responsabilidades de grado máximo. Ellos son el signo evidente de los valores personificados que San Juan Bosco trabajó con los jóvenes y que sus Salesianos siguen desarrollando.
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