“‘Fratelli tutti’, escribía san Francisco de Asís para dirigirse a todos los hermanos y las hermanas, y proponerles una forma de vida con sabor a Evangelio”. Con estas palabras, el Papa Francisco empieza su tercera encíclica, ‘Fratelli tutti’. Como ya hiciera en ‘Laudato si’’, Francisco encuentra inspiración en ‘il poverello d’Assisi’, en esta ocasión para hacer un llamamiento a la fraternidad y la amistad social. El Santo Padre firmó la encíclica el pasado sábado, 3 de octubre, precisamente en Asís (Italia).
La encíclica consta de 287 puntos, repartidos entre la introducción y ocho capítulos. El Papa vuelve a incidir en problemas de constante actualidad, como las desigualdades sociales, la inmigración forzada, la cultura del descarte o el cuidado del planeta, aunque también aborda otros más recientes, como la crisis provocada por la pandemia del coronavirus. Frente a estos problemas, el Santo Padre receta amor fraterno: “Una fraternidad abierta, que permite reconocer, valorar y amar a cada persona más allá de la cercanía física, más allá del lugar del universo donde haya nacido o donde habite”.
Artículo resumen en Vatican News.
Foto: Vatican News.
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