Fallece Guillermo Navarro González, salesiano sacerdote

8 febrero 2019

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Desde la Inspectoría Salesiana María Auxiliadora se comunica que, entrada la noche del jueves 7 de febrero de 2019, fallecía en Las Palmas de Gran Canaria el salesiano sacerdote Guillermo Navarro González. Tenía 92 años de edad y había cumplido los 74 de salesiano y los 65 de sacerdote. Desde hacía unos quince días se encontraba en tratamiento por insuficiencia cardíaca y otras dificultades derivadas de su diabetes, que se han ido agravando.

La capilla ardiente quedará instalada en la sala 108 del tanatorio de San Miguel (calle Aldea Blanca 3, Urbanización Industrial Las Torres). El sábado día 9 de febrero, a las 11:00, se procederá a la inhumación de sus restos en el cementerio de San Lázaro.

El martes día 12 de febrero, a las 20:00, se celebrará la Eucaristía en la parroquia de Santa Catalina de Alejandría (Salesianos, calle Beethoven 4).

Don Guillermo nació en Tejeda (Las Palmas), el 15 de octubre de 1926. Hizo el Noviciado en San José del Valle, donde profesó el 16 de agosto de 1944 y allí mismo cursó el primer curso de filosofia (1944-45). El 2º curso lo hizo en Utrera-Consolación (1945-46). El tirocinio lo realizó en Antequera (1946-49), y la teología la estudió en Madrid-Carabanchel (1949-1953), recibiendo la ordenación sacerdotal en Madrid, el 28 de junio de 1953.

Desde entonces ha venido desarrollando su labor pastoral en La Orotava (1953-55; 1966-67; 1969-79; 1984-85; 1991-2003); Teror (1955-56); Santa Cruz de Tenerife (1956-58; 1967-69); Ronda-Castillo (1958-59); Las Palmas de Gran Canaria (1959-63; 1985-91); Pozoblanco (1963-66); Códoba-Don Rinaldi (1979-82); Córdoba-San Fco. de Sales (1982-84). Desde 2003 ha trabajado en las Palmas de Gran Canaria, hasta su fallecimiento ayer noche.
  
Que el Señor Resucitado acoja con ternura al hermano Guillermo entre todos aquellos que han entregado su vida a la misión salesiana, y que María Auxiliadora, a la que tanto amó, lo acoja con el cariño de Buena Madre del cielo.

Que descanse en paz este salesiano sencillo, bueno y ejemplar.

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