Salesianos El Campello acogió la jornada de inicio de curso y la celebración del 15 aniversario de la entidad. Más de 130 trabajadoras y trabajadores se reunieron para poner en valor el camino recorrido durante todo este tiempo y conocer los nuevos retos que asumirá la entidad en los próximos seis años, recogidos en el Plan inspectorial del ambiente Plataformas Sociales.

Acompañaron a FISAT los salesianos José Luis Navarro, vicario inspectorial; Joan Valls, coordinador inspectorial de Plataformas Sociales; Jordi Tarrazó, coordinador de Pastoral de FISAT; Nando Navarro, director de la Obra de Salesianos San Juan Bosco Valencia, Segundo García, director de la Obra Salesianos Alicante; Santi Muñoz, director de la Obra de Salesianos San Antonio Abad; Vicente Serrano, salesianos Elche; Juan Orestes Fernández, salesianos Burriana, y Antonio Zaragoza, director de la Obra de El Campello.

Tras el momento del Buenos días, y los saludos iniciales por parte de José Luis Navarro, Joan Valls y Nacho Beltrán, se presentó el cambio de nombre de la entidad y su nueva imagen corporativa que se hará oficial en las próximas semanas.

Alcanzar una edad tan señalada requiere echar la vista atrás y reflexionar sobre cómo desde los proyectos sociales de cada casa salesiana se ha continuado con el legado de Don Bosco. A través del testimonio de vida de Segundo Garcia, que durante 25 años estuvo ligado a los proyectos sociales de la plataforma educativa social (PES) de San Antonio Abad y a FISAT; Sonia Humada, directora de la PES de San Juan Bosco Valencia y del centro de día Entre Amics; y Pili Úbeda, directora de la Casa Don Bosco Valencia, se transmitió la importancia del estilo salesiano, el principal valor diferenciador. “Es la inspiración desde dónde se hacen las cosas. Quizá todas podamos hacer lo mismo en cuanto a la materialización de la intervención. Pero el desde dónde y el cómo marca diferencias bien claras. Inspiración evangélica, sistema preventivo, creer firmemente en las posibilidades de cambio y de mejora de todo joven, compromiso por la transformación de la sociedad en el intento de abordaje no solo de las consecuencias sino de las causas de la exclusión”, explicó Segundo García.

En el marco de la celebración se hizo entrega de un reconocimiento a las personas con una mayor trayectoria en la entidad. El obsequio simbólico, una figura de Don Bosco en metacrilato, se realizó gracias a la ilustración de Agustín de la Torre.

El momento sorpresa del encuentro fue la participación del humorista Pere Aznar que con su perspicaz capacidad de análisis, radiografió la figura del educador/a en lo social. Gracias al vínculo que se creó con el cómico en el programa 400 de À Punt, Aznar conectó desde el cariño y el reconocimiento a la labor de FISAT, y ofreció un divertido punto de vista de la intervención social.

La jornada finalizó con una comida y una dinámica para fortalecer el ambiente de familia de la entidad.