El proyecto IMEX ha sido liderado por FEPA (Federación de Entidades con Proyectos y Pisos Asistidos) a la cual pertenece la fundación FISAT. El objetivo de este proyecto ha sido crear un itinerario para que jóvenes de 18 a 25 años que han estado en el sistema de protección de menores puedan desarrollar su propio proyecto de vida en la edad adulta.

Con el objetivo de garantizar sistemas de apoyo de calidad para la emancipación en todos los territorios, IMEX ha diseñado un sistema de indicadores. En España hay alrededor de 36.000 niños, niñas y adolescentes bajo la tutela del Estado de los cuales 4.466 se ubican en la Comunidad Valenciana.

El proyecto, cuyos resultados se presentaron en un acto en la Universitat de València, es fruto de la colaboración entre FEPA, 36 entidades de nueve comunidades autónomas (YMCA, Fundació FISAT y Fundació Amigo en Comunitat Valenciana), personas jóvenes extuteladas, universidades y organismos públicos.

En la presentación de los resultados participó FISAT como entidad de referencia en emancipación en la Comunitat Valenciana.

Cristina Martínez Ferrando, una de las responsables del proyecto IMEX en FISAT explicó algunas de las conclusiones extraídas tras la experiencia adquirida en el transcurso del proyecto.

“La clave es la garantía de un derecho. La persona joven necesita una red de apoyo. Que no esté garantizado como derecho lo deja a voluntad del profesional o de la cultura de la entidad. No garantizar ese derecho lo convierte en algo aleatorio. Hay que garantizarlo como derecho. Este proyecto es una oportunidad de evaluar de manera crítica qué tenemos que mejorar”.

Claves del nuevo modelo de intervención

El objetivo principal de este nuevo modelo de intervención es poder proporcionar a las personas jóvenes extuteladas un acompañamiento personalizado, transversal y continuado que ponga fin a las situaciones de desamparo que se producen cuando, al cumplir la mayoría de edad, abandonan el sistema de protección de menores.

“Esta propuesta supone un cambio radical, dejar atrás el modelo asistencial institucional del que venimos y caminar hacia un modelo de atención centrado en la persona joven y con un enfoque comunitario”, señaló la responsable del proyecto IMEX y subdirectora de FEPA, Paloma Garrido.

Referente de emancipación

Uno de los ejes vertebradores de este modelo de intervención es la propuesta de una nueva figura profesional, el referente de emancipación cuya función es prestar apoyo a la persona joven en las áreas de su vida en las que sea preciso, con el objetivo último de garantizar su tránsito a la vida adulta de forma autónoma y poniendo su proyecto de vida en el centro de la intervención.

Este nuevo modelo, apuntó Cristina Martínez, quiere evitar que a los 18 años la persona “sufra una desconexión absoluta y deba enfrentarse a todo lo que implica la vida adulta sin el acompañamiento que ha tenido hasta el momento”. Se trata, en definitiva, de avanzar hacia un sistema personalizado y flexible que favorezca el empoderamiento de la juventud extutelada y facilite su proceso de emancipación.

Atención comunitaria vs asistencialismo

Por otro lado, el nuevo modelo de intervención en la atención a personas jóvenes extuteladas supone sustituir definitivamente el paradigma de atención asistencial por uno de atención comunitaria y desinstitucionalizadora. Se entiende que sólo desde el trabajo en red y una política de alianzas en el territorio será posible proporcionar apoyos y recursos a las personas en cualquier esfera y tomen las riendas de sus proyectos de vida.

Sistema de indicadores

Además, el Proyecto IMEX ha desarrollado –en colaboración con la UNED, la Universitat de Lleida y la Universitat Autònoma de Barcelona– un sistema de indicadores que permitirá medir y evaluar las políticas públicas destinadas a promover la emancipación de la juventud tutelada y extutelada en España. Esta herramienta permitiría a las Administraciones identificar y definir los recursos y sistemas de apoyo mínimos que debería garantizar cada territorio en función de su realidad social.riana, Elche, Villena y Alicante. En 2023 72 jóvenes fueron acompañados en estos recursos.