Joana Monzó

Esta semana me crucé en instagram con el vídeo que se ha hecho viral del concierto de Lewis Capaldi. El artista, diagnosticado con el síndrome de Tourette, sufrió una crisis durante su actuación. Los tics motores con los que se manifestó este episodio impedían a Lewis continuar con la actuación, pero el público estaba allí para sujetarlo.
Imagino que ya lo has visto pero si no, búscalo porque es muy emocionante ver y escuchar cómo miles de personas lo arropan cantando como una sola voz.

Al hilo de este episodio, tan duro y tan bonito, quiero traer a este espacio la reflexión de mi compañero Isaac Azor, educador social y psicólogo en la fundación FISAT, que además es un súper influencer que analiza la realidad con su ojo crítico y lo lleva al terreno de la educación. (@isaacazor_ )

Isaac nos habla de la importancia de las amistades verdaderas y fuertes. Todas y todos nos vamos a sentir hundidas en algún momento de nuestra vida y necesitaremos que alguien esté ahí para sujetarnos. “La familia, los amigos, cuando son de corazón, cuando les importas de verdad y te ponen primero cuando las cosas van mal, son ese público que como a Lewis, sostiene tus emociones, tu malestar, tus miedos y ansiedades… La familia también juega un papel muy importante en esto. Siempre que tengo la oportunidad se lo digo a los adolescentes. Poner unas pocas amigas y amigos verdaderos en tu vida va a facilitar mucho que no te sientas hundido, que no te sientas hundida. Eso no quita que te vayas a sentir así, pero sostendrá mucho la situación”.

Qué importante es construir relaciones sanas que nos sostengan y poder ser tú el sostén de quien lo necesita.  Eso nunca será debilidad, en realidad será un privilegio. Debemos dejarnos sujetar cuando lo necesitemos y estar atentas para ser como el público de Lewis Capaldi, acompañando con bondad.