Cáritas Parroquial en la presencia salesiana de Jesús Obrero se consolida como un pilar fundamental de apoyo social desde el Polígono Sur de Sevilla. Con un enfoque centrado en la acogida, la educación y la promoción de la mujer, esta organización realiza una labor encomiable gracias a la dedicación de sus voluntarios desde tres ejes de atenciones

En Cáritas Acogida, con 16 voluntarios, se ofrece atención integral a personas con diversas necesidades, desde vivienda y alimentos hasta orientación personal. Su principal objetivo es que cada persona que acude a ellos se sienta escuchada y respetada, independientemente de su religión o nacionalidad. “Desde pago de recibos, ropa, medicinas, material escolar, electrodomésticos, arreglos de viviendas…en esa acogida derivamos y ayudamos en lo que podemos, pero sobre todo intentamos, a la luz del Evangelio, que esa persona se vaya con la sensación de que se le ha escuchado, sin prisas, sin cribar la religión o la nacionalidad a la que pertenece y procurando que, sobre todo, la dignidad, ternura, esperanza y el respeto sea lo que se respire en ese rato a pesar de la dureza de muchas situaciones”, comparte Lourdes Prats, directora de Cáritas, sobre la labor realizada. «Lo principal para el equipo es la promoción de la persona como ser creado y criado por Dios”, explica sobre la labor realizada desde la parroquia de lunes a jueves, por las mañanas, atendiendo a las personas, haciendo trabajos administrativos, de coordinación con administraciones y entidades. por un equipo formado por 14 personas que se dedican a las diferentes tareas.

Desde el Proyecto Maparra de Cáritas Jesús Obrero, dedicado al apoyo escolar y lúdico de niños de primaria y secundaria, se cuenta con la participación de 70 niños y 60 voluntarios. Por otro lado, Cáritas Isabel Arias trabaja en la promoción de la mujer a través de una tienda de ropa usada, alfabetización, pintura y taller de lectura, con 15 voluntarias y 40 mujeres beneficiarias.

«Recientemente, se recibió en la Parroquia la visita de un grupo de mujeres de Cáritas Tánger, propiciando un encuentro enriquecedor en el que se compartieron experiencias y se constató la similitud de problemáticas sociales a ambos lados del Estrecho. Esta visita también puso de manifiesto la importancia del ecumenismo, demostrando que cristianos y musulmanes pueden trabajar juntos en la atención a los más necesitados”, explicaban. «La visita nos pareció muy enriquecedora, donde nos dimos cuenta q los problemas son muy parecidos, aunque las realidades tienen algunas diferencias, especialmente todo lo referente a frontera o al salto de la valla. Fue estupendo el comprobar cómo es posible el ecumenismo, cada uno desde nuestra vida, como cristianos o musulmanes, atendemos de una forma muy parecida, con unas herramientas de trabajo prácticamente iguales y con una sensación muy muy agradable de que compartíamos «algo» muy importante ,con lo cual fue muy fácil la comunicación entre los dos equipos de Cáritas”, añadían.

La labor de Cáritas Parroquial Jesús Obrero es un ejemplo de solidaridad y compromiso con el barrio, y su trabajo conjunto con Cáritas Tánger abre un camino esperanzador para la cooperación y el entendimiento intercultural.