Jose Ramón González Toca, encargado de las aulas terapéuticas de nuestro colegio de Los Boscos de Logroño nos ofreció una sintética, pero estupenda charla sobre salud mental y pandemia. Yo me quedaría horas escuchando y charlando con Jose.

Y luego  nos puso a trabajar. Nos planteó una propuesta muy interesante para realizar con los chicos y chicas: La rutina emocional. Algo que hacen ellos en sus aulas todos los días: Cómo estás de energía, de ánimo… Qué pensamientos no te puedes quitar de la cabeza, qué pensamientos me dan fuerza… Con qué actitud afronto el día… etc.  Y lo primero que pensé fue: ¿no deberíamos hacer esto todos? Como un chequeo, una itv rápida de nuestra mente y alma… Ahí lo dejo…

Pero a lo que quería llegar yo hoy es que después nos puso a practicar en parejas. Una persona «entrevistaba» y la otra respondía y compartía sus sentimientos; y a mí me tocó preguntar.  Y al llegar al segundo apartado, «el termómetro»,  había que preguntar cómo estabas de estado de ánimo entre 0 y 100. Hasta ahí todo bien. Pero luego vino una pregunta que me desarmó: ¿Que te hace estar en ese número y no más abajo?…  ¡No más abajo!

Y es que lo que me salía, lo que a todos nos sale, es preguntar por qué, por qué estás tan abajo… Pero aquí lo que nos propone Jose es darle la vuelta a la tortilla: En qué te apoyas, qué te empuja…

Esto en Psicología se llama «enfoque centrado en  soluciones».

Y yo no es que no lo supiera, pero es que no me lo quito de la cabeza desde entonces. ¿Cuál es mi enfoque cotidiano? ¿ Con qué enfoque miro y hablo con mis hijos,  alumnos, familia? ¿Con el del por qué… o con este?

Y nada más. Sólo quería compartir este pensamiento que, desde el jueves pasado no me quito de la cabeza. (Pero tranquilo, Jose. No es un pensamiento de vaca, de esos que rumiamos y rumiamos, sino de los de caballo, de los que te hacen galopar y sentir el viento en la cara).

Y a vosotros ¿Qué es lo que os hace estar ahí y no más abajo?… Ahí lo dejo.