El pasado mes de febrero y después de dos años de dura pandemia covid19 se estrenó el Coro y orquesta Auxiliadora Valladolid que pertenece a la Parroquia de María Auxiliadora de los Pajarillos. El coro y orquesta nació como el resultado de la fusión del coro parroquial ya existente y de nuevos miembros que aterrizaron en nuestra parroquia con aires y melodías que buscaban dignificar y realzar nuestras celebraciones religiosas.
Podemos decir que hemos generado un auténtico ministerio musical promovido por un grupo de laicosy laicas que buscan ayudar a la comunidad a participar de la Eucaristía para alabar a Dios y fortalecer su fe. Sabemos que la reforma litúrgica a partir del Vaticano II afectó en profundidad al canto y a la música. Las consignas dadas por el concilio fueron: La invitación a que toda la asamblea tomara parte activa en la celebración. Aceptación de todas las formas de música auténtica, que tengan las cualidades debidas. Definición del papel ministerial del canto. Y esto es lo que hemos querido poner en valor en nuestro servicio musical dominical.
La pregunta del millón es si los coros parroquiales tienen futuro. Pregunta difícil y compleja donde las haya. Mirad, podemos decir con humilde entusiasmo que tienen -de momento- presente. Formamos un Coro parroquial heterogéneo, un coro de familias donde están varias generaciones implicadas y comprometidas. La media de edad es avanzada, pero nuestro coro sigue activo. Y, además, cuando empastamos bien las voces cantando, por ejemplo: ‘Ven a la fiesta’ o ‘Jesús ven tú’ de Toño Casado experimentamos interiormente esa sensación de unidad personal y comunitaria que provoca que la celebración se convierta en una fiesta de auténtica alabanza al Señor.
¡Eso lo vivimos y experimentamos en nuestro servicio musical en Compostela! El salesiano D. Paco García – gran testigo del Nazareno al estilo de D. Bosco- nos dijo al finalizar la celebración: la intervención musical dio calidad honda y piadosa a la celebración de la Eucaristía en honor a nuestra madre Auxiliadora. Gracias por vuestro arte y galanura’. Por lo que podemos concluir que la música ayudó a que la celebración se volviese si cabe más sagrada.
D. Bosco llega a decir que sus casas sin música son como un cuerpo sin alma. Indudablemente la música sigue siendo un medio muy adecuado para entrar en relación con los jóvenes, y crear un ambiente cálido donde cada persona, cada joven, pueda establecer una relación de amistad con el Nazareno. Los coros parroquiales tienen presente y ¡somos testigo de la belleza evangelizadora que provoca la música! Y así, os lo transmitimos.
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