Además del momento de reunión como tal, se aprovecho la participación de tantos centros juveniles para pensar cuáles eran las prioridades de la educación en el tiempo libre de cada asociación, en qué se está trabajando y cuánto camino queda por recorrer. Así, el momento de puesta en común servía para valorar lo más importante, en dónde seguir enfocándose en cada uno de los centros juveniles y asociaciones.

Cambio en la junta directiva

Pero la parte más emotiva de la asamblea fue, sin duda, la despedida del presidente Iván Ramos. Tras cuatro años al frente de la federación, donde el ritmo de las actividades lo ha marcado, en gran medida, la pandemia; Iván realizó una gran labor para seguir motivando al consejo y convertir cada reunión en un espacio donde reflexionar y proponer cómo seguir mejorando el trabajo de acompañamiento a los jóvenes. Le toma el relevo Irati Fernández, de Rentería. “Con sus años de experiencia, su simpatía natural y sus ganas de seguir mejorando, no podíamos ponernos en unas manos mejores”, afirman los participantes en esta asamblea.

“Volvemos de la asamblea con el ánimo para afrontar la otra mitad del curso renovado. Es muy bonito contar con este equipazo para continuar viviendo y trasladando el sueño de Don Bosco a todas nuestras jóvenes”, concluyen.