Una foto de un acto religioso en el patio de la presencia salesiana en la localidad de Puertollano. Este documento histórico expone la imagen de la celebración de la eucaristía delante del monumento colegial de Domingo Savio en el año 1971. Entre los asistentes fotografiados reconocen al director Alfredo Iglesias que preside el acto. Esta es un documento recuperado en la celebración de la efeméride de los cincuenta años de la fundación de la obra.

Para recuperar su memoria hemos escarbado en los primeros años del Colegio, donde hemos comprobado que, en 1954, la víspera del todavía beato, por la tarde se dedicaba a realizar las confesiones infantiles «con la idea hermosa de honrar a su Santo Protector»;  las señoras de la Archicofradía acuden a engalanar el altar, terminando «rezando todos por su pronta canonización».

Pocos días después, el 11 de marzo de 1954, aparece en el diario LANZA un artículo de la fiesta consagrada a Domingo Savio, haciendo al final un canto pro-salesiano. Un par de días después, con motivo de la fiesta del ya Santo Domingo Savio, el altar fue bellamente engalanado por las damas de Archicofradía, a este respecto, era digno de ver en la capilla su imagen aureolada delante del altar por multitud de flores de almendro. Por la tarde, la familia Giménez Úbeda, benefactores de la Casa, regalan caramelos a los niños asistentes a los actos

Testimonios personales de lo más cualificados nos indican que para realizar los jardines y monumento de Santo Domingo Savio del Colegio San Juan Bosco de Puertollano se convocó un concurso hacia el año 1968. El Director Santiago Martínez Álvarez quería erigir en el patio del Colegio un monumento a este singular personaje salesiano y pensó realizar un concurso abierto para todos los alumnos que mejor presenten un proyecto.

El ganador fue Manuel Tapia, un chico con mucho talento en el que la Comunidad confiaba, el conocía bien de cerca sus actitudes. Este joven vivió unos meses encandilado en el asunto y presentó exactamente el monumento de este santo que hoy ilumina los patios del Colegio en forma de lirio o azucena.

La imagen de Santo Domingo fue comprada en Olot (Gerona) por Santiago Martínez. Su colocación en el patio que lleva su nombre suscitó dos fiestas: la de la Primera Piedra y la de su Inauguración propia . En la primera fiesta, cada clase confeccionó sus propias cartas y pergaminos para  depositarlas en una urna enterrada bajo el pedestal del monumento, donde se reflejaban los nombres de todos los alumnos del Colegio. En ese mismo acto se celebró una fiesta monumental y el día de su patrón se repitieron las celebraciones.

Últimamente, este Bien Cultural inventariado necesitaba atención para su correcta conservación. Una decisión restauradora se desarrolla en estos importantes bienes considerados como prioritarios por sus características, problemática de conservación y significado que requieren de una atención específica.

Ahora, el monumento de Domingo Savio de Puertollano muestra un aspecto renovado, en un intento de recuperar el esplendor que tenía en el momento de su creación.  El principal objetivo de  esta restauración pretende garantizar su conservación en buen estado para el presente y el futuro.

 FUENTE IMAGEN: ARCHIVO SALESIANOS  PUERTOLLANO (por Alonso Jiménez Linares)